En 1888, Ferdinand Hurter y Vero Charles Driffield patentaron un dispositivo denominado actinógrafo para medir la potencia actínica (o química) de la luz, diseñado con el propósito de poder ajustar adecuadamente los tiempos de exposición y las aperturas de las cámaras, basándose en la sensibilidad de la película fotográfica, hora del día, época del año, y latitud. ⁣

Hurter y Driffield dicen: «Lxs fotógrafxs que combinen el método científico con las habilidades artísticas y expresivas están en la mejor situación para producir un mejor trabajo fotográfico.»⁣